Crédito fotografía: 
Referencial
Este sábado 7 de septiembre a las 23:59 los relojes deben adelantarse una hora en Chile Continental e Insular (salvo en la región de Magallanes y la Antártica Chilena que cuenta con horario único), para iniciar el horario de verano hasta abril del próximo año.

Si bien el cambio en el huso horario es completamente seguro para la población, influye en la rutina y hábitos de los adultos, pero en los niños, adultos mayores y enfermos crónicos puede ser aún más significativo, ya que por lo general necesitan un poco más de tiempo para adaptarse.

Una situación similar ocurre con quienes presentan trastornos del sueño, un grupo no menor, considerando que según un estudio de la Pontificia Universidad Católica de Chile, el 63,2% de los chilenos asegura tener algún tipo de problema al momento de dormir.

El 63,2% de los chilenos asegura tener algún tipo de problema al momento de dormir.

El neurólogo y jefe del departamento de Enfermedades del Sistema Nervioso de Clínica RedSalud Santiago, Alex Espinoza, aseguró que “si bien el nuevo horario permite disfrutar de días más largos, aprovechando al máximo la luz solar, este cambio horario podría a la afectar la salud de las personas, tanto física como psicológicamente”.

Es por ello que el especialista, entrega algunas recomendaciones para enfrentar de manera adecuada este fin de semana.

Comenzar unos días antes el cambio de rutina

El Dr. Espinoza recomienda que unos días antes de este cambio de hora, comencemos a acostarnos entre 15 minutos a una hora antes de lo habitual para así al adelantar las horas sueño, y no sentir de golpe el impacto del tiempo que perderemos.

Para los pacientes con trastornos como el insomnio o apneas del sueño, es clave prepararse antes: “si se levantan habitualmente a las 9 de la mañana, desde ya ir ajustando la alarma para despertarse a las 8, así el cambio no será tan brusco”, explicó.

Alimentación liviana

Los hábitos de alimentación también son relevantes al momento de dormir. “El día del cambio de hora se debe cenar liviano e idealmente dos horas antes de prepararse para dormir”, explicó el especialista de RedSalud.

“Si se tiene una ingesta abundante previo a acostarse puede contribuir a un mal descanso. Al día siguiente del cambio de hora, lo ideal es comenzar la mañana con un buen desayuno y almuerzo para mantener la energía durante toda la jornada” agregó el Dr. Espinoza.

Considerar una rutina de deporte

El ejercicio también es muy relevante a la hora de un buen descanso. El ejercicio, dos horas antes de dormir, favorece la liberación de sustancias precursoras del sueño como la serotonina. Sin embargo, “se recomienda no hacerlo muy cerca de la hora del sueño, porque también se liberan sustancias activadoras que podrían mantenernos despiertos por más horas”, agregó el experto.

Exponerse al menos una hora al sol

Al haber más luz en las mañanas, se termina la liberación de melatonina, la precursora que activa el mecanismo del sueño. Por ello, Espinoza aseguró que “si se adelanta el reloj en una hora, también eso puede influir en el rendimiento escolar de los niños. Con más luz durante el día, los niños tendrán más energía, estarán más atentos y con más concentración”.

También recomienda “evitar exponerse a pantallas o luces azules, mínimo dos horas antes de ir a dormir y después de las ocho de la noche, usar luces bajas y cálidas”.

 

 

 

 

 

 

 

 

Suscríbete a El Día y recibe a diario la información más importante

* campos requeridos

 

 

Contenido relacionado

- {{similar.created}}

No hay contenido relacionado

Cargando ...

 

 

 

 

 

 

 

 

Diario El Día

 

 

 

X