Gremio agrícola de la región apoya visa temporal a extranjeros para cubrir vacantes

Como si no fuera suficiente, además de las negativas consecuencias de la escasez hídrica que desde años afectan al sector agrícola, ahora este rubro debe enfrentar un nuevo problema que se ha visto agravado en estos últimos meses: la falta de mano de obra. 

En efecto, pese a que en los últimos meses los indicadores laborales han mostrado un sostenido descenso de las cifras de desocupación en el país y en la Región de Coquimbo, el agro local está viviendo una grave situación producto de la falta de trabajadores en los campos en momentos en que además, se acerca la temporada de cosecha de especies tan importantes para la región, como es la uva de mesa. 

En todo caso este problema no es nuevo, puesto que en junio pasado la Sociedad Agrícola del Norte, SAN, realizó una encuesta a más de 100 agricultores, cuyo objetivo fue conocer a nivel macro, el impacto en la Región de Coquimbo de la falta de trabajadores en las labores del agro.

En aquella oportunidad –y cuando aún el país tenía números relativamente altos de contagios por Covid- el 94,3% de los agricultores manifestaba haber tenido problemas con respecto a la contratación de la mano de obra para labores agrícolas en la temporada 2020-2021.

En aquel momento además, la tasa de vacancia laboral en la agricultura llegaba al 50%. 

Recurso de urgencia 

No obstante, y pese a la disminución de los contagios, el avance de la región en el Plan Paso a Paso, y a la reapertura de las actividades económicas, la vacancia en el sector agrícola está lejos de disminuir. Todo lo contrario. 

Daniela Normabuena, secretaria ejecutiva de la SAN, explica que “hoy día tenemos un déficit de casi un 80% de mano de obra en comparación a las temporadas pasadas. Eso quiere decir que hoy día necesitamos medidas urgentes para poder promover y apuntar a la mano de obra agrícola que son manos tan importantes para poder sacar adelante esas cosechas”.

A nivel nacional en tanto, el presidente de Fedefruta, Jorge Valenzuela, explica que “si se mantiene esta situación, debiera haber entre 150 mil y 200 mil vacantes para las cosechas sin trabajadores”.

Toda esta situación ha generado que hoy el gobierno recurra a una medida que ha venido siendo considerada desde hace un buen tiempo por los gremios y por el propio Ejecutivo: permitir el ingreso de trabajadores extranjeros mediante una “visa temporal” de trabajo y así suplir la escasez de trabajadores locales en el sector.

Daniela Norambuena advierte que “estamos ad portas de la temporada agrícola principalmente, del inicio de la cosecha de uvas que son unos de los principales cultivos presentes en nuestra región, y es por eso que esta medida que es la visa temporal de trabajo, se necesitaría con urgencia, para que así podamos agilizar los procesos migratorios en nuestro país para quienes tengan la finalidad de trabajar”.

Ejemplos parecidos

En declaraciones a Emol.com, la ministra de Agricultura, María Emilia Undurraga, confirmó que el gobierno se encuentra trabajando ya en este tema y que incluso se está trabajando en la elaboración de un reglamento el cual dice, “se hace cargo de la ley de migraciones –promulgada en abril- para tener una migración segura para los trabajadores y, en el fondo, con reglas claras para ambos involucrados, tanto los trabajadores como el país que los recibe”.

Dicho reglamento, explica la secretaria de Estado, contempla precisamente esta visa temporal de trabajo, a través de la cual se busca avanzar hacia un sistema “que dé cuenta de la necesidad de poder suplir mano de obra, porque son en el fondo, trabajos muy temporales pero a su vez, que también dé la tranquilidad para aquellos que vienen con condiciones conocidas por todos que permitan que esto sea una oportunidad no solamente para una temporada, sino que una proyección en el mediano y largo plazo”.

El ideal es seguir sistemas parecidos a los que existen en países como Nueva Zelanda, Australia, o el estado de California en Estados Unidos, apostando por una población migrante, “especialmente de Perú y Bolivia, que viene para las temporadas frutícolas específicamente para suplir estas labores que son intensivas, producto de los ciclos biológicos de esta actividad”, sostuvo Undurraga. 

En ese sentido, y en medio de un contexto especialmente sensible por la crisis migratoria que se vive hoy en el norte del país, el presidente de Fedefruta, Jorge Valenzuela, aclaró que con esta visa “no buscamos reducir los costos con la contratación de extranjeros, sino dar una oportunidad laboral para muchos que buscan trabajar. Sin embargo, la situación migratoria y el acceso a trabajo debemos hacerlas en un marco regulado, seguro y estable”.