• Durante estos últimos días el precio del cobre ha sufrido una caída hasta topar los US$ 2,57 la libra, fenómeno impulsado por la guerra comercial entre China y Estados Unidos.
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LAUTARO CARMONA
Los efectos de la disputa entre ambas potencias han desatado temores que tienen preocupados a los actores mineros. Sin embargo, confían en que esta situación no se extienda indefinidamente, y pueda llegarse a una suerte de acuerdo durante la cumbre de la APEC que se llevará a cabo en Chile.

Desde el gobierno siguen con atención el devenir del precio del cobre, el que durante estos últimos días ha sufrido una caída hasta topar los US$ 2,57 la libra, fenómeno impulsado por la guerra comercial entre China y Estados Unidos. Esto a su vez ha generado una subida casi imparable del dólar, superando los 720 pesos, niveles que no se veían desde 2016.

Ante tal escenario, el presidente de la Sociedad Nacional de Minería, SONAMI, Diego Hernández, sostuvo que es probable que esta incertidumbre se mantenga por más tiempo de lo esperado “pues cada vez que llegan a un acuerdo, ese acuerdo se cae despues, aumentan las medidas de represalia y efectivamente esto ha afectado las expectativas de crecimiento de la economía china. Y como ellos son los principales consumidores de cobre y de otros muchos metales, ha afectado la expectativa del precio del cobre”.

En ese sentido, el dirigente gremial reconoció que un precio del cobre a ese nivel, “no es un precio bueno. Es una mala noticia para nosotros”. No obstante aseguró estar optimista respecto al “mediano y largo plazo, porque justamente la oferta y la demanda de cobre está muy apretada y podría faltar justamente cobre, y eso haría reaccionar el precio”, aunque no hay certeza de cuando ello podría ocurrir.

Por su parte, el seremi de Minería, Roberto Vega, hizo un llamado a la tranquilidad, señalando que hasta el momento, “nos hemos preocupado principalmente en proteger a los medianos y pequeños productores mineros y para ello, está operando plenamente el fondo de sustentación del precio del cobre que a través de ENAMI, les da un precio mejorado de la tarifa internacional que se aplica en Londres. Solo a partir de los US$3 los mineros empiezan a pagar una especie de crédito que se da para mantener la actividad minera”, expresa.

Por último, si bien reconoce que esta guerra comercial puede tener impacto en la apertura de nuevas faenas, Vega aclaró que ello sólo impactaría en el tiempo que demoraría ponerse en operación una faena, no su puesta en marcha. “Recordemos que en la región tenemos varios proyectos interesantes como El Puquío y El Espino, los cuales, una vez que logren ciertos permisos sectoriales, entrarán a operar”, señaló.

 

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