Pandemia golpea fuerte al turismo y comercio local durante Semana Santa

Han sido tiempo duros para el comercio en el país desde octubre del año pasado. Fue en el verano cuando algunos locales pudieron recuperarse de sus pérdidas, sin embargo en marzo nuevamente llegaron las malas noticias con el coronavirus, llevando a algunos al cierre definitivo de sus puertas, como fue el caso del restorant Porota en la Avda. del Mar que a finales del tercer mes del año anunció su clausura.

Semana Santa, así como los días festivos y vacaciones, significan un gran impulso para el turismo en términos económicos, uno que lamentablemente se vio fuertemente afectado por la situación sanitaria actual y el llamado de las autoridades de permanecer en casa.

“Desde el 21 de marzo de este año, día en que se ordena el cierre de los locales asociados a Barrio del Mar, exceptuando la venta delivery. Esta noticia fue terrible para todo el grupo y para toda la población en general, pero sabemos que es algo que debemos asumir entre todos para cuidarnos y combatir de mejor manera esta pandemia” manifestó la presidenta de Barrio del Mar, María Antonieta Zúñiga.

Tras todo lo ocurrido en el país, febrero fue el mes que lograron repuntar y veían esperanzados en Semana Santa una oportunidad similar, sin embargo el destino les jugó una mala pasada.

“Lamentablemente ese sueño se vio frustrado debido a la gran crisis sanitaria que nos obliga a respetar ciertas normas de aislamiento que han motivado a muchos empresarios a reinventarse para mantenerse, otros ajustando todo para sobrevivir y unos simplemente a sucumbir a esta situación” agregó.

Reinventarse

De los locales asociados al Barrio del Mar, un 80% se mantiene cerrado producto del coronavirus y otros han optado por atreverse con servicios especiales.

“Hace unos días como marcha blanca a este fin de semana largo, algunos locales se atrevieron con servicios especiales, tal es el caso de Pub Oxígeno que ofrece variedad de menú al paso, o New Pirats y Santorini, que han lanzado nueva carta con productos escogidos para la venta delivery y aunque la partida fue lenta, esperamos que nuestros servicios puedan alcanzar a muchos más hogares” contó Zúñiga.

Añadió que continúan buscando nuevas alternativas para seguir ofreciendo buena gastronomía a precios convenientes y por supuesto, con las garantías de higiene y calidad de toda su línea productiva y de reparto.

“Otros aún trabajan analizando alternativas individuales como asociativas y en todas ellas prima la seguridad tanto de nuestros clientes y colaboradores, pero lo cierto es que no podemos detenernos, sabemos que 800 trabajadores dependen de Barrio del Mar y de ellos sus familias, por eso es que la preocupación es tremenda y a pesar de las medidas económicas que se han ido implementando en ayuda a esta crisis sanitaria y las iniciativas que han tomado los bancos para facilitar los créditos, lo cierto es que no son suficientes para todos los casos y detrás de ello hay empleos que no se podrán mantener por mucho esfuerzo que exista”.

Por otro lado, destacó que el movimiento social los había ayudado a prepararse y a trabajar de manera asociativa con más fuerza, “a cuidarnos entre todos y en materia de turismo venimos trabajando desde hace tiempo de manera relacionada, tanto el sector público como privados”.

Cámara de Turismo

Por su parte desde la Cámara de Turismo de Coquimbo, su vice presidenta Elizabeth Navarro expresó que este fin de semana largo había sido el “más desastroso que tenga recuerdos en mis 20 años de experiencia”.

Señaló que no había reservas, ni a corto ni mediano plazo y solo anulación de servicios en gran parte del comercio que se dedica al turismo, por eso que desde el gremio generaron una serie de invitaciones online para mantener el destino en vigencia una vez terminada la pandemia.

“Promover los establecimientos que pueden transformar sus negocios en delivery, promover la venta anticipada susceptible a cambios sin restricción post pandemia y compartir estados de situación del contexto regional y nacional” añadió que habían sido las estrategias incorporadas.

Los trabajadores

Miguel, trabajador de local Lighthouse, en la Avda. del Mar, comentó que la afluencia de público el fin de semana largo fue muy poca a diferencia del fin de semana anterior, donde asegura que el número de clientes había sido mayor.

En el caso de Miguel fue una jornada dura y son tiempos complejos, puesto que vive solo en Chile y debe pagar arriendo todos los meses, por lo que su opción es trabajar hasta que la autoridad decrete una cuarentena total.

En Beiru, local de comida árabe ubicado en la Avda. del Mar, solo recaudaron un 25% de lo que lograban otros años. Esta vez apostaron por el delivery mediante distintas aplicaciones que ofrecen ese servicio para no cerrar durante esta época.

En el restorant Santorini, una de sus trabajadoras, Constanza contó que su clientela frecuente ha sido la que los ha apoyado con las visitas, pero pese a que desde el local tomaron todas las medidas de resguardo la preferencia de los clientes son los pedidos con entrega a domicilio, sino con retiros en el local.

“Nosotros incentivamos la venta con despacho a domicilio, tenemos un descuento, le ofrecemos al cliente esa opción para que no salgan de sus casas. Para los que vienen acá pusimos dispensadores de alcohol en gel y estamos con todo lo solicitado por la Seremi de Salud, guantes, mascarillas, higienización por cada cliente que viene” aclaró.

Por otra parte, en el sector de la Caleta de Peñuelas desde la Lobera, Moira Plaza dijo que este fin de semana se había notado la baja de clientes, “igualmente nosotros pudimos atender, ya que tenemos clientela, pero se notó mucho la baja”.

En la Lobera está trabajando solo la familia con sistema de delivery y todas las medidas de resguardo, privilegiando el uso de transferencia y tarjeta antes que el efectivo y sanitizado de manera constante.