Esta semana fue promulgada la ley que elimina el 5 % de la cotización de salud de los pensionados mayores de 65 años. Ya en 2012, Chile había avanzado en la protección de los jubilados al rebajar de un 7 a un 5 % la cotización de salud para quienes recibían la Pensión Básica Solidaria o el Aporte Previsional Solidario; ahora, esa obligación se eliminará de manera progresiva.
Nuestro país, pese a sufrir los efectos de las caídas en la economía mundial, es capaz de hacer estos esfuerzos en favor de los más necesitados. Eso no lo hace cualquier nación y es por eso que confiamos en que el país no sólo está haciendo bien las cosas, sino que puede ir más allá.
La ley que la Mandataria acaba de promulgar va a beneficiar de manera directa a 300 mil familias, rebajando de un 5 % a un 3 % la cotización de salud, pero dentro de un año más, ésta se va a terminar: “por completo y para siempre”, como dijo la Presidenta. Será el Estado el que asuma ese costo en favor de las personas, tal como lo va a hacer la gratuidad de la educación y que será otra tremenda ayuda de enorme trascendencia.
La ley además extiende el beneficio de la Cuota Mortuoria a todos los beneficiarios de la Pensión Básica Solidaria que hoy no la perciben, de acuerdo a ciertas condiciones. Todo esto habla de una vocación que como país hemos desarrollado hace unos años y que ha sido el sello e impronta que le han dado los partidos de la ex Concertación y hoy, Nueva mayoría: equilibrar la cancha y hacer de Chile un país un poco más justo.
Se puede hacer más, sí; y para eso seguimos trabajando por un presupuesto que resguarde el crecimiento y la creación de valor en la economía, pero que al mismo tiempo sea responsable y equilibrado a la luz de la crisis.
Sin duda celebramos esta buena noticia para los jubilados, ya que cada aporte o mejora por muy pequeña que sea a las pensiones, tiene grandes impactos en la vida diaria de las familias. No hay que olvidar que este logro fue un compromiso de la campaña y los compromisos hay que honrarlos, todos ellos.
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