La PDI admitió la situación, y señaló que se trataría de individuos colombianos con alta preparación en este tipo de ilícito. El día lunes, Carabineros detuvo a una organización de tres personas y se investiga su vinculación con otros antisociales

La inquietud ha vuelto a instalarse para los usuarios de tarjetas bancarias. El año pasado, en dos oportunidades, se produjo una clonación masiva que afectó a más de 300 clientes de la banca. Primero, en el mes de junio, cuando durante la Copa América una banda arribó a la zona para intervenir los cajeros automáticos aprovechando la gran afluencia de turistas que vino a la ciudad en ese momento.


Posteriormente, la pesadilla pareció repetirse y en octubre un centenar de personas denunció que se les había extraído ilegalmente dinero desde sus cuentas. 


Ambos casos fueron investigados con dispar éxito. Mientras en el primero, la Brigada de Delitos Económicos de la Policía de Investigaciones logró dar con los antisociales, el segundo caso no pudo resolverse, por lo que la investigación siguió su curso, aunque las denuncias fueron disminuyendo paulatinamente. 
Pero el delito vuelve a estar en boga. Resulta que tras la detención de una banda de este tipo el día lunes en Coquimbo, la PDI reconoció que en el último mes se ha registrado un incremento de las denuncias por clonación de tarjetas y esto se debería a que en la actualidad hay al menos dos organizaciones criminales con alta preparación dedicadas al ilícito operando en la zona. 

EL HECHO QUE ENCENDIÓ LAS ALARMAS 

Fue un procedimiento de Carabineros el que una vez más encendió las alarmas. Funcionarios motorizados de la Segunda Comisaría se dirigieron a un cajero automático de Banco Estado, ubicado en Tierras Blancas tras un llamado de la central de comunicaciones que indicaba que tres individuos, dos hombres y una mujer se encontraban revisando los dispensadores de manera sospechosa. 


Luego de efectuar el control de identidad, se encontró entre las vestimentas de la mujer las tarjetas clonadas además de 351 mil pesos. Así lo precisó el mayor de la Segunda Comisaría Juan Carlos Pérez. “Efectivamente el personal constató que los individuos, que estaban tratando de sacar dinero, llevaban estas tarjetas clonadas y el dinero, por lo que fueron trasladados a la subcomisaria de Tierras Blancas, donde se constató que eran de nacionalidad colombiana y que dos de ellos se encontraban en forma ilegal en el país”, precisó. 


LA BANDA EQUIVOCADA 

El fiscal de turno dispuso la concurrencia de la PDI. Y es que ellos desde hace algún tiempo estaban tras los pasos de una banda de ciudadanos extranjeros, particularmente colombianos, que estaban cometiendo este ilícito en la región. Sin embargo, no se trataba de la organización a la que ellos intentaban encontrar. Con esto se comprobó que en este momento existe más de una banda cometiendo el delito en la zona. 


Consultados en la PDI, el jefe (S) de la Brigada de Delitos Económicos, Juan Bermejo, admitió que en una primera instancia se pensó que la banda que había sido detenida era la que ellos estaban buscando, pero que finalmente no eran los mismos sujetos, lo que causó preocupación. “Nosotros mantenemos una investigación en relación a la clonación de tarjetas, a una banda de similares características a la que fue detenida, pero se estableció que ellos no eran nuestro blanco”, precisó Bermejo, quien, no obstante, manifestó que la información que puedan obtener luego de la detención de ayer es de suma importancia. “Lo que sigue ahora es clarificar si estas bandas, la que se detuvo y la que nosotros buscamos, están vinculadas. Hay situaciones que tenemos que analizar técnicamente para ver si hay conocimiento entre los sujetos, revisar los modus operandi y una serie de análisis que tenemos que realizar”, agregó Bermejo. 

MÁS BANDAS 

 El policía, aunque no precisó cuantas, reconoció que existe más de una banda dedicada a la clonación de tarjetas operando en la zona y admitió que lo más probable es que, a diferencia de la que delinquió en la región durante la Copa América 2015, la cual fue capturada y cuyos integrantes eran chilenos, ahora estarían proliferando las organizaciones extranjeras, fundamentalmente de Colombia. “Es de conocimiento que en la zona no es sólo una banda la que opera. Sería irresponsable dar un número exacto, porque es algo que hay que investigar (…) En relación a la procedencia de ellos, hay que admitir, sin ánimo de estigmatizar que efectivamente los integrantes de estas organizaciones, en particular la que han delinquido este año, tienen origen extranjero, esta es una tónica”, concluyó el comisario Bermejo.

 

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