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Alejandro Pizarro/ Cedida
En la jornada de hoy, podría entregarse un testimonio fundamental, de parte de la doctora Carmen Cerda, quien realizó un metaperitaje sobre la autopsia, las fichas clínicas y los informes toxicológicos. Esta visión contrasta con la defensa, que sostiene que David Espinoza “nunca tocó” a la joven el día que perdió la vida en forma dramática

Ayer se realizó una nueva jornada del juicio por el caso de la joven Daniela Reyes, que dejó de existir a los 17 años de edad el 26 de febrero de 2017, tras ser encontrada, en condiciones deplorables, tras haber recibido diversos golpes en la cabeza y en otras partes de su cuerpo.  Recordemos que este hecho ocurrió en el sector de Las Compañías, y aunque la menor fue trasladada hasta el Hospital San Juan de Dios de La Serena, al día siguiente falleció.

Recordemos que si bien la autopsia de Daniela señaló como causa de la muerte un edema pulmonar agudo producto de un envenenamiento por consumo de sustancias tóxicas, la familia de Daniela Reyes es enfática al señalar que se debió a la golpiza recibida por la pareja de la joven, David Espinoza, quien en ese momento tenía 19 años.

En ese contexto, desde la parte querellante sostienen la tesis del femicidio, ya que se le habría producido un traumatismo craneano que, presumiblemente, había incidido en forma directa en su deceso.

 

Recapitulando el caso

Cabe señalar que en la primera jornada de juicio oral, se realizaron los alegatos de apertura de la Fiscalía, de los querellantes y de la defensa, oportunidad en la que declaró el acusado, David Espinoza y la madre de Daniela, María Espejo.

En la segunda jornada, declaró la abuela de Daniela Reyes y además lo hicieron dos vecinas más como testigos.

En la tercera, que se realizó ayer, declaró Katia Cabrera, médico legista de La Serena, con el sustento de que es el edema pulmonar agudo el que provocó la muerte a Daniela, como consecuencia del consumo de carbamatos, conclusiones del Servicio Médico Legal de La Serena.

Resaltar que hoy estaría declarando, como prueba fundamental para buscar esclarecer este crimen, la doctora Carmen Cerda. “Ella realizó un metaperitaje sobre la autopsia, las fichas clínicas y los informes toxicológicos, que sustentan nuestra tesis de que ella dejó de existir producto de un traumatismo encéfalo craneano. Insistimos que sólo se encontró en sangre la tropina, medicamento utilizado como antídoto frente a insecticidas o venenos”, subrayó el abogado querellante Pedro Orthusteguy.

Cabe señalar que el juicio oral podría extenderse hasta el lunes, que se caracteriza por una mayoría de testigos presenciales. En ese contexto, la defensa insiste en la tesis del envenenamiento, la que se contrasta con la parte querellante, las dos líneas discordantes en este caso.

Resaltar, además, que a la Fiscalía le resta presentar prueba documental.

Con dichas acciones, terminaría la presentación de los medios de prueba del ente persecutor.

 

Fe de Erratas

En la edición de ayer de diario El Día (página 10), se consignó por error que “declaró la abuela de Daniela Reyes, Rosa, quien fue testigo presencial de lo ocurrido el 26 de febrero de 2017, quien aseguró que la ingesta de veneno habría venido después de los golpes y que se trató de un antecedente entregado por el acusado”. Sin embargo, la señora Rosa sólo confirmó los golpes, ya que el envenenamiento es sólo la postura de la defensa del imputado.

 

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