Familia de motorista atropellado libra batalla por demostrar que imputado conducía ebrio

El dolor por la trágica muerte de Rodrigo Jofré (36), durante la noche del 28 de agosto del 2020, nunca podrá ser superada por su familia, pero están luchando porque se haga justicia y el responsable pague por sus actos.

El camino no ha sido fácil, y tras haber tenido un revés luego que se revocara la medida cautelar de prisión preventiva para el imputado, quien lo atropelló cuando Jofré se traslada en su motocicleta, se levantaron a dar una batalla en la Corte, logrando que el individuo volviera a estar privado de libertad mientras se desarrolla la investigación sobre este caso que dejó a los padres, esposa e hijos de la víctima, francamente devastados. 

UNA NOCHE FATAL 

Pero todo se remonta hace casi cinco meses. Eran pasadas las 21:30 horas cuando Rodrigo salió desde su emprendimiento de sushi ubicado en el sector de Nova Hacienda, que estaba levantando junto a su señora y otro socio. A bordo de su motocicleta, llevaba un pedido al sector de Tierras Blancas, pero nunca llegó a su destino. La tragedia se interpuso en el camino y en la vida del ingeniero civil coquimbano. Cuando pasaba por la intersección de Avenida Eduardo Frei Montalva con calle Talca Sur, en la comuna puerto, una camioneta no respetó la señalética de viraje impactándolo y dejándolo gravemente herido al borde de la acera.

Minutos más tarde y sin que nadie le prestara ayuda, falleció, lo que fue constatado por personal del Samu y Carabineros, que concurrieron al lugar luego que alguien diera aviso, y hallaron el cuerpo sin signos vitales. 

UN AUTOR CONFESO 

Pese a que en un comienzo se hablaba de un accidente sin terceros involucrados, tras los informes policiales se logró establecer tanto la dinámica de lo ocurrido, como la identificación del conductor del vehículo que atropelló a Rodrigo Jofré. Se trataba de Nelson Tejas, de 62 años, quien pese a darse cuenta de lo ocurrido, se dio a la fuga sin prestar ningún tipo de auxilio al motorista, ni tampoco dar aviso a algún recinto de salud. 

Pero antes de que se ordenara su detención, el hombre decidió entregarse por su propia voluntad, acompañado de su abogado. Lo que llamó la atención de la contraparte y también de la familia fue el hecho de que lo hiciera tres días después del accidente, cuando ya no podía comprobarse, por ejemplo, si iba o no bajo la influencia del alcohol, algo que aumentaría drásticamente las penas.  

Tejas reconoció los hechos y fue formalizado por cuasidelito de accidente de tránsito con resultado de muerte, no prestar ayuda a la víctima y por la infracción al artículo 318, ya que todo ocurrió durante el toque de queda. 

REVOCACIÓN DE LA CAUTELAR 

El individuo quedó en prisión preventiva, aunque su abogado defensor Raúl Castillo apeló en distintas oportunidades a esta medida cautelar, siendo negada la solicitud. Sin embargo, en el último recurso, que es precisamente de este mes de enero tuvo éxito y la jueza decidió revocar la medida cautelar a cambio de una caución, quedando sólo con arresto domiciliario nocturno, lo que indignó a los familiares, provocando que se reabriera aún más una herida que ni siquiera comenzaba a cicatrizar.

“Para nosotros fue muy duro, porque son fechas muy complicadas las que tuvimos que pasar, pero al menos nos daba una luz de esperanza el que esta persona estuviese en la cárcel mientras se investiga, pero que lo hayan dejado libre es algo que a nosotros nos rompió el corazón”, aseveró Elicet Hidalgo, la pareja de Rodrigo. 

Ella entiende que cualquiera puede tener un accidente, pero no perdona el hecho de que el individuo no se haya parado a prestar ayuda, habiendo pasado nuevamente por el lugar, dejando morir a su ser querido. “Eso es lo que uno no entiende. Es simplemente de alguien que no tiene corazón. Si él no tenía nada que ocultar, nada que temer, por qué huyó, por qué se arrancó. Si hubiese pedido ayuda tal vez Rodrigo estaría vivo, y sus dos hijos no estarían sufriendo como lo están haciendo, ni yo, ni sus padres, ni hermanos”, consigna la mujer. 

De igual forma, Rigoberto Jofré, padre del fallecido, cuenta que cuando supo que el sujeto saldría de la prisión preventiva, no hallaba cómo reaccionar, se le vinieron a la mente los recuerdos de aquella noche en la que le avisaron que su hijo había perdido la vida, y el dolor fue casi igual de grande. “Este tipo nunca debió haber estado libre, por algo ya lo habían determinado otros jueces. Nunca entendí cómo lo dejaron salir, pagando un poco de dinero y haciendo no sé qué cosas más. Siento que fue demasiado injusto”, precisó. 

“SE HIZO JUSTICIA” 

Pero el abogado representante de las víctimas, Carlo Silva, de inmediato apeló a la nueva resolución, ya que no le pareció consistente. “Fuimos a la Corte y esta vez ordenó la prisión preventiva nuevamente, lo que, entiendo yo, es lo más lógico, que se revirtiera la resolución. La Corte coincidió en que para revocar la prisión preventiva se construyó un argumento en base a ningún antecedente nuevo. La defensa puso sobre la mesa que el individuo había puesto dinero, pero el dinero no vale en este tipo de causas, pusieron sobre la mesa también el que estaba colaborando en la investigación porque se había entregado, pero resulta que entregarse tres días después junto a un abogado no es colaborar, es un tiempo suficiente para no poder corroborar si es que estaba o no en estado de ebriedad, entonces no había nada nuevo, así que se modificó el criterio con el que se le había quitado la cautelar”, expresó. 

UN PELIGRO PARA LA SOCIEDAD

En definitiva, en esta última resolución, la Corte consideró que el imputado sí constituye un peligro para la sociedad, lo que se había establecido desde un comienzo, pero que fue modificado cuando se revocó la prisión preventiva.

“Lo que pasa es que la última vez se cambió esa calificación de peligro para la sociedad, por el peligro de fuga, por eso lo dejan salir, pero resulta que esta persona antes del hecho que le costó la vida a Rodrigo, tenía dos condenas previas por manejo en estado de ebriedad, entonces, claramente, nosotros creemos, representa un peligro para la sociedad”, sostuvo Carlo Silva. 

La nueva, y esperan en la familia, última resolución en torno a la cautelar del sujeto también fue bien recibida por la pareja y el padre de Jofré. Elicet manifestó que, en cierta forma, volvía la sensación de tranquilidad. “Para nosotros es súper bueno que él esté en prisión y no esté en su casa. No sólo por nosotros, porque nada garantiza que esta persona no vaya a hacer lo mismo y exista una nueva víctima. Claramente él es un peligro. A mí me deja conforme lo que se logró, pero falta mucho camino y nada nos va a devolver a Rodrigo”, aseveró, emocionada. 

Por su parte, Rigoberto agregó que “está donde tiene que estar. Lo mínimo que podría haber hecho era ayudar o dar aviso que atropelló a alguien y no dejarlo ahí, al borde de la muerte”. 

“DEMOSTRAR QUE IBA EBRIO”

Pese a que el Ministerio Público optó por un cuasidelito de homicidio para formalizar, al no contar con las pruebas suficientes para imputar una condición etílica al margen de la ley por parte del conductor de la camioneta, el querellante particular de la familia, Carlo Silva, es claro en señalar que aquí existe un delito.

“Mi querella fue por delito -no cuasidelito- de homicidio de accidente de tránsito en estado de ebriedad con resultado de muerte, el problema es que como se presentó tres días después no tendremos la prueba científica, pero dentro de la investigación vamos a intentar probar por cualquier medio que esto fue así y que él venía en malas condiciones”, expresó Silva, y el padre de la víctima coincide.

“Por supuesto que está claro que iba ebrio y eso se ve en las cámaras de seguridad. Se nota en su manera de conducir, errante. Lo que pasa es que él tuvo una muy buena asesoría y se entregó cuando ya no se podía probar, pero siempre existirán formas y aquí va a primar la verdad”, manifestó.

Su pareja, Elicet, también asegura que irán hasta el final. “Haremos todo lo posible por comprobar esa versión, porque aquí, te insisto, una persona que está en su sano juicio, que es ya mayor, si hubiese estado sin alcohol, no se da a la fuga y vuelve tres días después. Aquí algo hay, porque es sumamente extraño que se entregue cuando sabe que no se le pueden hacer exámenes, porque no se le encontraría nada”, relata quien fue la compañera de vida de Rodrigo, quien partió para no volver, dejando dos hijos, y un millón de sueños. 

DEFENSA DEL IMPUTADO: “DON NELSON ESTÁ ARREPENTIDO” 

El abogado defensor de Nelson Ojeda, Raúl Castillo, descarta que su representado haya estado conduciendo en estado de ebriedad y afirma que está totalmente arrepentido de su error, tanto así, que ha intentado por todos los medios poder reparar el daño causado, adelantándose a una demanda civil, pero la familia lo ha rechazado.

“Don Nelson ha procurado en todo momento colaborar en una reparación que esté dentro de su alcance (…) La diferencia entre el carácter ético que está teniendo mi representado, en relación a otros imputados por delitos similares, como el del caso del Puente Zorrilla, es gigante, y eso se tiene que valorar, por eso en su momento se revocó la prisión preventiva. Y no es posible que haya ido en estado de ebriedad, esos son fuegos artificiales porque no existen antecedentes de aquello. Además de no poder acreditarse, él no puede consumir alcohol porque ha sufrido dos infartos al corazón”, concluyó el defensor, quien por lo pronto, no apelará para la sustitución de las cautelares, pero elaborará una nueva estrategia.