El complejo panorama de las librerías ante bajas ventas escolares

Un panorama muy distinto es el que viven actualmente las librerías de La Serena en comparación a años anteriores, donde se apreciaba a un gran número de apoderados haciendo filas en diversos locales con el fin de adquirir la lista de útiles escolares para el inicio de las clases.

Hoy la realidad es otra, las librerías ya no sacan las cuentas alegres que cada verano hacían antes del comienzo de año, todo por causa de la crisis sanitaria.

A solo una semana del inicio del año escolar la incertidumbre de muchos padres y apoderados ha repercutido en el rubro, especialmente cuando el 2020 las clases se desarrollaron en gran parte de manera remota y en muchos casos sin utilizar todos los elementos solicitados por los establecimientos escolares.

Claudio Rivera, subgerente de Agroplastic contó a El Día que años anteriores las listas comenzaban a llegar en el mes de enero y a través de diferentes vías, tanto presencial, como por mail y teléfono, lo que en esta ocasión no ha sucedido.

“Hoy en día no hay ninguna lista escolar, desconozco si hay algún colegio que ha enviado listas. A esta altura, en otros años, nosotros teníamos vendido el 40% de los útiles escolares”, sostuvo Rivera.

Tanta ha sido la diferencia, que durante los meses del verano en Agroplastic debían contratar personal de apoyo para abastecer la demanda de los clientes, puesto que con el personal de planta no alcanzaban a armar todas las listas que les demandaban.

Una situación que igualmente viven en la Librería Rojas, donde las ventas cayeron abruptamente durante el 2020, influidas por el estallido social y posteriormente la pandemia, manteniéndose varios meses del año pasado cerrados.

Allí admiten que la temporada escolar prácticamente no ha existido, logrando a la fecha vender solo un 10% de lo que hacían en años anteriores, donde las personas se aglomeraban en el local y esperaban con paciencia su turno para adquirir los insumos necesarios.

SIN NUEVA MERCADERÍA

Durante el 2020 este tipo de negocios permaneció cerrado parte de marzo y durante la cuarentena al no ser comercio esencial. Eso, sumado a un año escolar sin clases presenciales, influyó en que las librerías no vendieran los elementos que normalmente hacían, acumulándose stock en sus inventarios.

Por esa razón, en la librería Rojas optaron por no hacer nuevos pedidos a sus proveedores y vender los insumos que aún quedaban de la temporada pasada, puesto que anticipaban que tampoco sería un buen año.

Claudio Rivera, de Agroplastic admite que actualmente en sus bodegas tienen un 60% de los productos de la temporada anterior, la mayoría intactos.

“Ni siquiera nos hemos atrevido a hacer pedido a nuestros proveedores, tenemos mercadería del año pasado” comentó.

El subgerente indicó que existe incertidumbre en los propios colegios sobre cómo funcionarán este año, lo que ha influido en las decisiones de los padres, quienes no se atreven aún a invertir en útiles que pueden o no usar sus hijos o hijas, por lo que las personas han sido más cautas a la hora de comprar, adquiriendo lo justo para la inicio del año.

LISTAS MÁS REDUCIDAS

Desde librería La Selecta, Daniel Valerdi, jefe de administración, comentó que pese a que han recibido algunas listas, la cantidad no se compara con años anteriores, donde ya a finales de diciembre había quienes se adelantaban con las compras escolares y hacían llegar sus requerimientos.

“A nosotros nos empiezan a comprar las listas desde la semana del 24 de diciembre en un año normal. Este año igual hubo algunas en esa fecha, pero no lo que se ve siempre”, señaló Valerdi, quien agregó por lo que más la gente ha preguntado ha sido por libros y textos escolares.

“Hoy (lunes) hubo tres listas en la mañana, pero ya son más chicas que antes, no son las listas gigantes que habían otros años. Eso se debe a que los mismos colegios disminuyeron las listas al inicio, para pedir durante el año, entones no es lo mismo, ahora están pidiendo como el 60% de lo que siempre piden, pero durante el año van a pedir más cosas”, explicó. 

Asimismo, el hecho de no saber la modalidad que tendrán los estudiantes, ha influido, puesto que de manera online la cantidad de implementos que utilizan y requieren los niños y niñas es mucho menor a lo utilizado en clases presenciales, lo que también ha afectado.

NUEVAS ESTRATEGIAS

Han sido diversas modalidades que han debido adquirir los negocios con la pandemia, implementando el sistema delivery, reserva de horas de atención, así como retiros en el local.

En Macondo, por ejemplo, han optado por la creación de un sitio web, redes sociales, y la venta a través de WhatsApp y correo electrónico, acercando la tienda a los usuarios y facilitándoles la compra, tras la disminución de público.