Un total de 180 nuevas sepulturas permitirán responder a la demanda de la ciudadanía durante un plazo de 5 meses, mientras se hacen las gestiones para ejecutar el proyecto de ampliación que está paralizado a causa de la falta de resolución sanitaria del recinto.

Como medida urgente para enfrentar el colapso existente en el cementerio municipal de Coquimbo y dar respuesta a la comunidad que exige soluciones, la administración comunal ordenó la construcción de 180 nuevas sepulturas tras la demolición de igual número de nichos en el sector antiguo del camposanto porteño. 

De esta forma se espera dar una solución provisoria a la problemática que se arrastra desde hace ya dos años y que genera una serie de críticas desde los propios coquimbanos, quienes en la actualidad deben optar por recintos privados para dar sepultura a sus deudos y asumir el costo económico que ello significa, optando también algunos de ellos por otros camposantos existentes fuera de la comuna.

Al respecto se refirió el administrador municipal de Coquimbo Juan Pablo Villa, quien detalló que las obras que se inician este sábado responden a una primera etapa, que luego se complementará con la edificación de 1.080 nuevas sepulturas. “Estamos dando una respuesta en lo inmediato, para luego entregar una solución integral”, manifestó.  

No obstante, el colapso del cementerio porteño ubicado en calle San Miguel se debe a la imposibilidad de realizar la ampliación de sus instalaciones al carecer de resolución sanitaria desde su conformación. Así, en el lugar hoy sólo existen 4.600 sepulturas, y otros 150 nichos que se han habilitado con el correr de los meses ante las continuas denuncias y reclamos de la comunidad.

PROYECTO PARALIZADO. En el año 2015 el municipio de Coquimbo adquirió un terreno colindante al camposanto para desarrollar un proyecto de ampliación. Pero la irregular distribución de las sepulturas en el cementerio, su cercanía a zonas residenciales, la carencia de conexiones a la red de alcantarillado y el uso de sistemas de pozos para evacuar las aguas no permiten a la Seremía de Salud otorgar la resolución sanitaria para dar pie a la iniciativa. 

Así se encuentra detenida a causa de un reglamento no actualizado y que data del año 1970.  “Estamos realizando las gestiones necesarias para “poder dar pie a la iniciativa, ya que es evidente la urgencia por ampliar las instalaciones ante la demanda de la comunidad”, afirmó el administrador municipal de Coquimbo, Juan Pablo Villa.   

PORTEÑOS. Durante el recorrido por el cementerio municipal se pudo dialogar con quienes en esos instantes visitaban a sus deudos, y en general valoraron los trabajos al interior del recinto para enfrentar la problemática antes descrita.

Pero a la vez insisten en la necesidad de ampliación de las instalaciones y llamaron a las autoridades a avanzar hacia  esa solución,  considerando que en la región de Coquimbo existen 101 cementerios funcionando, de los cuales sólo 8 poseen resolución sanitaria. Por tanto, el restante número de recintos se ve imposibilitado de expandirse o concretamente crecen fuera de la norma. 

“Creo que es necesario derechamente comenzar a construir un  nuevo cementerio, ya que este recinto es antiguo y no posee lo necesario para funcionar. Los nuevos nichos claro que servirán en lo inmediato, pero en algunos meses el problema de fondo continuará”, señaló Eugenio Carvajal.
Similar impresión tuvo Carmen Cortés, quien junto a su hijo visitaba la sepultura del difunto padre de familia, y manifestó que para muchas personas es doloroso no poder dejar a sus deudos en un solo recinto. “Este cementerio se debe ampliar y mejorar su funcionamiento, no es posible que no tengamos un lugar público donde descansar al fallecer. El problema viene desde hace años sin solución”, concluyó.    

ALTERNATIVA A CONSIDERAR. La comunidad de Majada Blanca se ubica en el sector Pan de Azúcar de Coquimbo, y cedió un terreno al municipio para la habilitación de un parque cementerio, propuesta que no ha visto avance al interior de la administración comunal y que según los porteños debe ser considerada.

Quien inicialmente realizó las gestiones para lo antes mencionado fue el dirigente social del sector rural de la comuna de Coquimbo Jaime Castillo, y sobre ello señaló que “estamos molestos con la administración comunal, ya que los comuneros donaron 4 hectáreas al municipio para construir un cementerio ante el colapso existente, pero las autoridades no realizaron la gestión. Esto debe cambiar para dar una solución a la ciudadanía”, concluyó.  

 

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