• Se espera que las nuevas cifras entregadas por el INE signifiquen el inicio de una curva descendente del desempleo en la región.
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Lautaro Carmona
La cifra, correspondiente al último trimestre móvil junio-agosto, sitúa a la Región de Coquimbo sin embargo, como la segunda con más cesantía del país. Desde la academia el llamado fue a analizar estos números con especial cautela, pues su evolución –positiva o negativa - dependerá exclusivamente de como marche la economía.

Un leve quiebre en la tendencia alcista de la desocupación en la Región de Coquimbo quedó en evidencia este miércoles luego de la publicación de la última encuesta nacional de empleo elaborada por Instituto Nacional de Estadísticas, INE.

Según el informe, en el último trimestre móvil junio-agosto, el desempleo se situó en un 15,8%, levemente por debajo del trimestre móvil anterior, en 0,3 puntos porcentuales.

No obstante, la Región de Coquimbo aún se mantiene entre las regiones del país con mayor nivel de desocupación. De hecho, ocupa la segunda posición, siendo superada solamente por la Región de Los Ríos (15,9%).

Al respecto el seremi del Trabajo, Matías Villalobos, destacó que “podemos ver por primera vez una moderación en la Tasa de Desocupación si lo comparamos con el trimestre anterior. Además, la pérdida de puestos de trabajo no fue tan elevada como fue en el periodo anterior lo cual nos da un indicio de que podemos en los próximos meses ir saliendo de esta complicada situación que estamos viviendo en la región de Coquimbo en esta pandemia”, afirmó la autoridad.

“Podemos ver por primera vez una moderación en la Tasa de Desocupación si lo comparamos con el trimestre anterior”, Matías Villalobos, seremi del Trabajo

En efecto, en este último trimestre, la fuerza de trabajo se redujo en un 14,9%, mientras que los ocupados lo hicieron en un 23,3%. Por su parte, los desocupados aumentaron 105,8%, incididos mayoritariamente por los cesantes (109,5%).

Cautela

Sin embargo, pese al leve descenso que muestra la curva de desocupación, aún es temprano para poder proyectar si efectivamente, podemos estar ante el techo del proceso de destrucción de empleos, o bien, los números podrían volver a subir durante los próximos meses.

Pablo Pinto, director de la Escuela de Ciencias Empresariales de la UCN, señaló que las cifras que entrega el último informe del INE “son bastante preliminares, las cuales deben analizarse con cautela en el sentido de señalar que estaríamos en condiciones de entrar a una estabilización”.

En ese sentido, Pinto reconoce que los números del informe del INE presentan dos fenómenos: el primero, en que aparentemente se estaría llegando a una situación en que las cifras de desempleo estarían tocando techo. Al mismo tiempo sin embargo, se registra un alza muy significativa de los inactivos (los que se retiraron de la fuerza laboral), lo que a juicio del experto, es muy preocupante.

Desempleo femenino

Otra arista alarmante que deja el boletín del INE es que la tasa de desocupación, al ser dividida por sexos, son ellas las más perjudicadas por el aumento de la cesantía.

“En el caso de la mujer, la tasa de desocupación es la más alta registrada en la región desde que se tiene medición (2010), y llegó al 14,1%. Esta cifra esconde un aumento significativo en las tasas de inactividad que en el caso de la mujer llegó al 57,3%, lo que significa más de 25 mil mujeres que salieron del mercado laboral si se compara con el año 2019”, explica el académico.

Pero no es lo único, pues a eso se suma una pérdida efectiva de más de 36 mil empleos, lo que totaliza alrededor de 62 mil mujeres impactadas de manera directa por los efectos de la pandemia en el mercado laboral regional.

Cifras pueden seguir altas

Bajo este contexto, el académico de la UCN reconoció que aún puede existir un espacio para que las cifras de desocupación puedan seguir aumentando.

Todo va a depender, durante el periodo de reactivación, de la tasa a la cual los inactivos ingresen al mercado laboral, pues cabe recordar que alrededor de 60 mil personas se han restado de la fuerza de trabajo, correspondientes a los trabajadores inactivos potencialmente activos. Ello, sin contar además a aquellos trabajadores que se encuentran acogidos a la Ley de Protección al Empleo, que en la zona alcanzan los 15 mil.

“En ese sentido, esas 60 mil personas una vez que las condiciones de reactivación se den, pueden volver a ingresar a la fuerza laboral y pudiésemos tener todavía tasas de desempleo al alza”, explicó, producto de una eventual mayor presión sobre el mercado laboral.

“60 mil personas una vez que las condiciones de reactivación se den, pueden volver a ingresar a la fuerza laboral y pudiésemos tener todavía tasas de desempleo al alza”, Pablo Pinto, director Escuela de Ciencias Empresariales UCN

De todas maneras insistió, la evolución del desempleo dependerá exclusivamente de como se comporte la economía durante la etapa de reapertura y por supuesto, de la capacidad que tenga el mercado laboral local para poder absorber la ya mencionada tasa de presión laboral. “Eso se traduce en que pudiéramos, incluso durante la reactivación, todavía seguir manteniendo cifras de desempleo altas, e incluso un poco más altas que las que se aprecian hoy día”.

Impacto en el empleo

De todas formas, las consecuencias que esta crisis ha dejado sobre la estructura del mercado laboral no son menores, e incluso, afirma el director de la Escuela de Ciencias Empresariales, Pablo Pinto, “en muchos sectores de la economía (comercio, hoteles y restaurantes, y construcción), se observa un retroceso de casi una década en el número de ocupados, lo que presenta un gran desafío en el corto plazo. Otros sectores como la agricultura, presenta un descenso estructural de la ocupación, llegando a número de ocupaciones de las menores registras en la región”.

Ante este impacto duradero en el mundo del empleo, el seremi Matías Villalobos enfatizó en la fuerte inversión pública que ha anunciado el gobierno y que permitiría visualizar una recuperación de los puestos de trabajo que se han perdido a la fecha, totalizando 89.630 empleos que se han perdido en un año, según el trimestre de medición.

“Si consideramos el anuncio en relación al subsidio al empleo para que los trabajadores que se han acogido a la ley de protección de empleo puedan retornar a sus lugares de trabajo y por otro lado la entrega de incentivo para la generación de nuevos puestos de trabajo, sumado al anuncio del presupuesto 2021 que tiene como enfoque principal el empleo, más la inversión pública regional que ya hemos conocido en la mesa de reactivación económica, nos hace esperar que los próximos meses la cifra de desempleo mejore, pueda ir disminuyendo y volver a generar puestos de trabajos de calidad que les permita a las familias  tener ingresos que les permita mejorar su calidad de vida”, comentó.

Subsidios al empleo

Este domingo pasado, el gobierno anunció un masivo programa de recuperación y apertura de nuevos empleos, para el cual se invertirá 2000 millones de dólares en el pago de subsidios a las empresas que sumen nuevos trabajadores a su planilla, o devuelvan a sus funciones a sus trabajadores suspendidos.

Según indicó el mandatario, el plan de creación de nuevos puestos de trabajo considera entregar hasta un 50% de la remuneración a la a la renta mensual bruta para las personas contratadas, con un tope de 250 mil pesos.

Además, en atención a que la crisis ha afectado especialmente a las mujeres, el subsidio se incrementará hasta el 60% cuando se contrate a una trabajadora, con un tope de 270 mil pesos mensuales. El mismo beneficio reforzado se entregará a jóvenes entre 18 y 24 años, y personas en situación de discapacidad.

Respecto a los trabajadores con contratos “suspendidos”, el gobierno anunció un subsidio de 160 mil pesos por cada trabajador reincorporado, al que sólo podrán acceder empresas afectadas por la pandemia y posterior recesión, demostrando caídas en sus ventas e ingresos de un 20% en el cuatrimestre abril-junio de este año, en comparación al mismo periodo de 2019, entre otras medidas.

Al respecto, el director de la Escuela de Ciencias Empresariales de la UCN, Pablo Pinto señaló que la iniciativa va en la línea correcta, “puesto que permite a los empleadores mantener a sus trabajadores por un periodo extendido con concurrencia de un subsidio que financia en parte las remuneraciones de los trabajadores”.

¿Qué falta? A juicio del experto, aún resta que el ejecutivo explique los detalles del proyecto, en cuanto a la forma en que operarán estos subsidios, “de manera que la mayor cantidad de las empresas puedan acceder a ellos”, señaló.

 

 

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