aforo

Las embarcaciones recreativas que realizan los tradicionales paseos rodeando las bahías de Coquimbo y La Herradura, han debido adaptar sus operaciones a la actual coyuntura sanitaria. No obstante, el alto número de personas que se embarcan en las naves genera dudas en cuanto a los aforos permitidos. Desde los “barcos pirata”, uno de los dueños señala que ello se debe a que el Ministerio de Salud, los considera como “transporte público” – es decir, no tendrían restricciones de aforo –. Desde la secretaría de Estado, aclaran sin embargo, que son “actividades recreativas”.

Desde algunos locales de la capital regional aseguran que por no contar con las ventajas de una terraza o instalaciones al aire libre, deberán cerrar su atención al público y regresar al delivery. En contraste, una serie de reuniones sí permitirán que recintos del sector de Peñuelas de la comuna puerto puedan sacar sus mesas al exterior y atender clientes.

La opción de limitar la cantidad de personas a las zonas costeras de ciudades más demandadas por los turistas, es una idea que están barajando las autoridades. En la región no es una medida que se vaya a implementar por el momento, aun así no la descartan para el futuro. Ediles apuestan por la toma de PCR a los turistas como opción viable, ya que, consideran imposible de fiscalizar el aforo en las playas.

Luego de casi 8 meses de inactividad, el operador de casinos más importante de Latinoamérica confirmó que ya cuenta con la autorización final de las autoridades para volver a poner en marcha el recinto ubicado en Peñuelas. La compañía detalló los protocolos que prepararon para prevenir contagios de covid-19.